28 marzo 2011

Juan Gris, el cubismo y yo

En 1971 yo tenía 22 años. Mi experiencia como pintor había comenzado apenas dos años antes y de una manera un tanto casual, pero eso no fue obstáculo para que me sintiera atraído por esta obra de Juan Gris que nada me decía sobre el cubismo pero que me atraía por sus formas y colores. Durante años la copia que hice de este cuadro ha permanecido expuesta en casa de mi madre que no dudaba en enseñársela a cuantas personas la visitaran. Hoy la enfermedad la ha obligado a abandonar su casa y con ella todos sus recuerdos. Alguno de esos recuerdos los he recuperado para mi, como esta copia del cuadro de estilo cubista original de Juan Gris que pinto hacia 1918 que tituló "El Hombre de Tours"  y que actualmente se encuentra expuesto en el Museo Nacional de Arte Moderno “Georges Pompidou” de Paris.
En estos días durante mis clases en el taller “Arte Express” he vuelto a recordar el cubismo, sus comienzos, sus artistas mas importantes,  y esta obra mía que ya tiene casi 40 años.

¿Y que fue el cubismo?. Pues bien……
El Arte ya no fue el mismo tras la aparición del Cubismo. El agotamiento del Arte tradicional conduce a artistas como Picasso y Braque a plantearse nuevos sistemas de representación de la realidad.
Las fuentes que sirven de inspiración al Cubismo están en el Arte negro, el de Oceanía, el antiguo Arte ibérico y la obra de Cézanne con su esencialización geométrica de las formas.
El inicio del movimiento arranca en 1907 con el cuadro de Pablo Picasso “Las señoritas de Avignon.” Junto a él, Braque es el otro gran pintor que contribuye al desarrollo del Cubismo.
La influencia del Cubismo alcanza a otros movimientos vanguardistas.  El Arte del siglo XX no hubiera sido posible sin él.
Un pintor español que desarrolló su actividad principalmente en París como uno de los maestros del cubismo fué Juan Gris (José Victoriano González-Pérez 1887-1927).
Entre 1904 y 1906 estudia en la escuela de artes y oficios de Madrid. En su adolescencia es ilustrador de publicaciones como Blanco y Negro y Madrid.
En 1906 para evitar la milicia y conocer vida artística, se muda a París donde conoce a Pablo Picasso y Georges Braque.
Sus primeros intentos como pintor cubista son de 1910 aunque en los museos españoles existen pocos ejemplos.
Por primera vez en  1906 emplea el seudónimo de Juan Gris y en enero de 1912 hace su primera exposición, irrumpiendo públicamente en el cubismo.
Entre sus mejores amigos hay que contar al crítico Maurice Raynal y a Braque, del que comenzó a distanciarse en 1919. También mantuvo una estrecha amistad con Picasso, que sin duda lo admiraba.
Pronuncia una conferencia, el 15 de mayo de 1924 en la Universidad de la Sorbona, Sobre las posibilidades de la pintura, donde resume su pensamiento estético. A partir de ese momento su nombre comienza a ser conocido en Europa.
La clave probablemente de la pintura de Juan Gris está en la relación de los objetos con el espacio plástico, siendo éste el que se define a partir de aquellos.
«Es hermoso, un pintor que sabía lo que hacía», le dijo un día Picasso a Kahnweiler delante de un lienzo de Juan Gris. En efecto, belleza estética y reflexión intelectual se aúnan en la obra del más puro y arquetípico de todos los pintores cubistas.
La cálida y alegre atmósfera mediterránea le inspira, sin embargo, toda una serie de naturalezas muertas con ventanas, donde descubre una veta amable que coincide en el tiempo con sus composiciones de melancólicos personajes.
Y así se desarrolla su estilo de los últimos años, vividos en un régimen casi monacal (pintura por las mañanas, reposo y dibujo por las tardes), hasta que una complicación de su afección pulmonar terminó con su vida en 1927.
Por desgracia, la muerte de Juan Gris no ocupó grandes titulares ni impulsó el reconocimiento inmediato. Aún hubo que esperar varios años para que se le considerara unánimemente como uno de los grandes maestros del cubismo.